fbpx

Energym

Gimnasio

Festejos: Recuperate en el gym

El verano siempre es más amigo para los festejos y las juntadas, el asadito, la salida nocturna y con ellas los excesos y trasnochadas habituales, que incluyen bastante alcohol y poco descanso.

Es que la noche y las vacaciones se prestan, y ya se sabe, después de cualquier celebración en la que participemos y nos pasemos un poco a la hora de beber, vendrá ese malestar que puede durar más de un día.

Entonces, surge la pregunta. ¿Se puede ir al gym como si nada, en esas condiciones? La respuesta es: sólo si si se va a hacer una sesión muy liviana, salvo que se esté un cien por ciento recuperado.

Si hay cansansio, lo mejor es hacer una sesión suave, que no comprometa el físico, la que además será muy positiva porque ayudará a quitar más rápido ese agotamiento que nos dejó el festejo. Sin embargo, ahora más que nunca, la guía del profesor es fundamental.

Sucede que cuando se ingieren bebidas alcohólicas, el encargado de metabolizarlo es el hígado, pero este noble y crucial órgano no puede hacerlo al ritmo que normalmente se bebe. Por lo que el alcohol pasa a la sangre, iniciando los efectos ya conocidos que se extienden más allá del festejo.

Mientras este proceso ocurre, el cuerpo empieza a eliminar todo el alcohol que puede por todos lados para ayudar al hígado, sudando más de la cuenta, despidiendo alcohol por el aliento y claramente, expulsando todo lo que puede por la orina.

Se entra en una fase de deshidratación que empuja naturalmente a tomar agua, totalmente necesaria, y con esta, el cuerpo vuelve a la carga eliminando todo le alcohol que pueda.

Por este motivo, hay que ser cuidadoso en el gimnasio e informarle al profe, sin vergüenza, que se viene al gym con ese malestar aun presente. Porque, aunque haya pasado lo peor, todavía el cuerpo está expulsando líquido y sudando y no está en condiciones para una jornada de gym normal y exigente.

Hacerlo lo contrario implicará correr el riesgo de que la deshidratación se acelere, lo que puede provocar un mal momento, una descompensación o o fuertes mareos.

En cambio, un entrenamiento suave, guiado y bien hidratado nos ayudará a recuperarnos del post festejo y a poner nuestro cuerpo en condiciones para la próxima sesión.

Scroll al inicio