Por miles de años, dioses y humanos han buscado con desesperación la fuente de la juventud pero siempre estuvo aquí, entre nosotros: el ejercicio físico es su elemento y el gimnasio, su templo.
Está comprobado médica y científicamente que hacer gimnasia aporta salud, bienestar y un estado de ánimo fuerte que nos ayuda a enfrentar el día a día.
El ejercicio, fortalece el corazón, oxigena la sangre y el cuerpo, elimina el colesterol, regula la presión arterial, reduce el azúcar en sangre, nutre de endorfinas que mejoran el estado de ánimo y el humor, combate el estrés y la ansiedad.
El ejercicio, hace los huesos más fuertes, la masa muscular más firme, la mente más lúcida a aportar proteínas y otras sustancias químicas claves para el cerebro.
El ejercicio hace que pasen los años sin que los años se noten, permaneciendo ágil, fuerte, firme, claro de mente y espíritu. Hace que la juventud siga estando allí como el primer día.